domingo, 30 de diciembre de 2018

Consejos de Baltasar Gracián para segurar un feliz año nuevo

Hoy, 31 de diciembre, todos nos desearemos lo mejor para el nuevo año. Los objetivos están más o menos claros: felicidad, prosperidad, paz… De los medios casi nadie habla. Alguna pista podemos inferior del libro de Baltasar Gracián “El Arte de la Prudencia” (1648). Seguro que, si tratamos de cumplir alguna de sus 300 máximas, el año 2019 será efectivamente nuevo y mejor para nosotros y los que nos rodean
Reflexiona, no te precipites. “Observa con rigor, piensa sutilmente, infiere con juicio”. “Algunos hacen y después piensan: buscan excusas más que consecuencias. Otros no piensan ni antes ni después. Toda la vida debe consistir en pesar para acertar el rumbo”. “Sopesa las cosas y otorga más importancia a las que más importan. Los necios hacen mucho caso de lo que importa poco y poco de lo que importa mucho”.
Conócete. “El que se conoce ayuda a su debilidad con reflexión”. “Hay que conocer y cultivar la cualidad más relevante y ayudar a los demás. La mayoría violenta su capacidad y por eso no destaca en nada”. “Conoce tu peor defecto para que no te domine como un tirano. Hay que declararle la guerra”.
Domínate. “No hay mayor señorío que el de sí mismo, de las propias pasiones”. “Quien no está en sus cabales no debe actuar: la pasión siempre destierra la razón”. “El ánimo es como la espada: debe ir siempre envainado en su prudencia hasta la ocasión oportuna”.
Aprende a convivir. “Atajo para ser una buena persona: saber relacionarse, aprendiendo de todos”. “Acostúmbrate a las malas condiciones de quienes te rodean; igual que te has acostumbrado a las caras feas”. “No seas cansino: lo bueno si breve dos veces bueno”.
           “En una palabra: sé una persona virtuosa. La virtud es la cadena de todas las perfecciones y el centro de la felicidad”.

La Tribuna de Albacete (31/12/2018)

domingo, 23 de diciembre de 2018

Concierto de Navidad



               Uno de los mejores violinistas del mundo fue invitado a interpretar un par de conciertos en Nueva York. A pesar de los elevados precios, el Carnegie Hall se llenó a rebosar. Todos escucharon en silencio reverente las notas que salían del Stradivarius y ovacionaron al violinista durante largos minutos. Al despedirse, el preguntó al empresario para cuándo estaba planeado su segundo concierto. “Para mañana a la misma hora –le respondió– y si no le importa lo tocará en la estación de metro Gran Central Terminal, vestido de harapos, como un mendigo más”.
               Así lo hizo. Repitió las mismas piezas, con el mismo violín y el mismo entusiasmo. Nadie se enteró de lo que allí estaba pasando. Los más generosos le arrojaron unos céntimos. Pararse a escuchar, lo que se dice pararse, solo lo hicieron tres personas y ninguna de ellas aguantó más de tres minutos.
               Lo que le sucedió a nuestro violinista es más común de lo que se cree. La mayoría de nosotros vivimos entre maravillas sin percatarnos de ellas. La Navidad es la maravilla de las maravillas. Dios se hace hombre y, para colmo, niño. Hace dos mil años, solo unos pocos pastores y tres enigmáticos extranjeros, apreciaron el misterio de la Navidad. En el siglo XXI, la proporción no debe de ser mucho mayor. Las luces de neón ocultan a la estrella de Belén. El ruido ahoga el susurro de Dios. Las prisas nos impiden pararnos a pensar. Ni nos asombramos por el misterio de la Navidad, ni lo valoramos, ni dejamos que nos interpele.
               Pero el misterio más grande de la historia de la humanidad está allí. El niño-Dios nos espera para llenarnos de su gracia.

La Tribuna de Albacete (24/12/2018)

domingo, 16 de diciembre de 2018

A un Señor de estos reinos



Las sesiones parlamentarias debieran retransmitirse fuera del horario infantil y marcadas con tres asteriscos para advertir que lo que allí se dice y, sobre todo, la manera de decirlo, es lo contrario de lo que a niños y adultos les conviene aprender. Nuestro paisano San Juan de Ávila, Doctor de la Iglesia universal, dirigió a mediados del siglo XVI una carta “A un Señor de estos reinos”. Reproduzco algunos párrafos por si sirviera de ayuda a los políticos del siglo XXI, obcecados como están por sus intereses personales, el orgullo y la ira.
“Mire y remire el que gobierna república si tiene esta fortaleza de amor, que, como fuerte vino, le embriague y saque de sí y de sus intereses y pase a ser padre de muchos con el amor y esclavo de ellos con el trabajo”.
“Ser el gobernador amigo de su parecer es cosa muy peligrosa y contraria a la prudencia, como en otra cualquier persona; y antes se ha de escoger un hombre que sepa menos, si conoce su falta y la remedia con el consejo de los más sabios, que otro que sepa más y está confiado que es él el que acierta y los otros no”.
“Un filósofo dijo, y con mucha razón, que la ira y la aceleración en los negocios son enemigos del buen consejo; y así conviene mucho mirar que el que ha de ser lumbre de los otros no tenga él su ojo ciego con la ira”.
“Y particularmente debe huir de palabras injuriosas y mal criadas, porque éstas antes suelen dañar que enmendar (…) Justo ha de ser el gobernador, y si fuere menester, riguroso en sus obras, mas en las palabras blando y muy comedido”

La Tribuna de Albacete (17/12/2018)

domingo, 9 de diciembre de 2018

Un terremoto para poner a prueba la solidez de la Constitución

De “terremoto político” se ha calificado al resultado las elecciones andaluzas. Posiblemente se quedará en un “temblor”. Terremoto o temblor, será una oportunidad para valorar la solidez de la Constitución española de 1978. De hecho, la prueba empezó hace varios años. La crisis económica de 2008 ha radicalizado los planteamientos políticos y ha catapultado nuevos partidos a la izquierda de la izquierda (Podemos) y a la derecha de la derecha (Vox). Asimilarlos a los comunistas de Stalin o a los nazis de Hitler sería un insulto injustificado. Tacharlos de inconstitucionales antes de que empiecen a andar, parece precipitado. 
La esencia de nuestra Constitución se resume en el artículo 1. “España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político. La soberanía nacional reside en el pueblo español”. A continuación. enuncia sus dos instituciones básicas: la forma política es la Monarquía parlamentaria; la forma territorial, el Estado de autonomías.
                ¿Cabe en esta Constitución un partido republicano? Pues sí, siempre que tenga la paciencia y la responsabilidad de reunir los 2/3 de los escaños requeridos para iniciar el proceso de reforma constitucional. ¿Son constitucionales los partidos independentistas o un partido como Vox que pretende suprimir las autonomías? Pues también, bajo las mismas condiciones.
                Los únicos partidos que quedan fuera de nuestra Constitución son los que rehúyen los compromisos del Estado de Derecho (en particular, el procedimiento de reforma constitucional); los que no aceptan el pluralismo político y las elecciones democráticas; los que inculcan la igualdad, la libertad y el resto de derechos fundamentales del ser humano. No es admisible un partido que discrimine abiertamente por razones de raza, sexo u orientación sexual. Tampoco un partido que imponga una ideología determinada y prohíba la crítica a la misma. ¡Aunque sea la ideología de género!
La Tribuna de Albacete (19/12/2018) 

domingo, 25 de noviembre de 2018

Constitución y separación de poderes


Uno de los mejores legados de la Ilustración (siglos XVII y XVIII) fue el Estado democrático de Derecho. Necesitamos de un Estado que proteja nuestros derechos y libertades. Y necesitamos protegernos de ese Estado que, tras monopolizar la mayoría de los poderes, puede cometer los peores abusos. Para conseguirlo, Montesquieu ideó la separación de los poderes. El poder legislativo, el poder ejecutivo y el poder judicial deben ser independientes con el fin de contrarrestarse mutuamente. ¡Sabio mensaje!
El poder es como un gas: tiende a dilatarse y evadir todos los límites. En la “partitocracia” moderna, el partido ganador elige el Gobierno cuyas propuestas se convertirán en leyes gracias a su mayoría parlamentaria. El poder judicial difícilmente logrará conservar su independencia cuando los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), los magistrados del Tribunal Constitucional, el Presidente del Tribunal Supremo y el Fiscal General son nombrados, directa o indirectamente, por el Gobierno. O por los pactos y cambalaches entre los dos partidos mayoritarios necesarios para sortear las mayorías exigidas por la Constitución. Peor todavía, si el Gobierno puede puentear las sentencias decretando el indulto de los condenados.
Recuperar la separación entre los poderes legislativo y ejecutivo se me antoja difícil. Me conformo con que existan elecciones libres donde “todos los votos tengan el mismo peso”. Recuperar la independencia del poder judicial, sí resulta factible. Bastaría con elegir a quienes han de ocupar esos puestos, por “sorteo” entre los magistrados que reúnan los requisitos legales.  
Si queremos asegurar la sostenibilidad de un Estado democrático de Derecho hemos de recuperar la separación de poderes introduciendo en la Constitución de 1978 las dos expresiones entrecomilladas. La experiencia de estos cuarenta años de democracia constitucional y el bochorno de la semana pasada a cuenta del presidente del CGPJ, lo piden a gritos.

La Tribuna de Albacete (26/11/2018)

domingo, 18 de noviembre de 2018

Democracia simple versus democracia constitucional


      El 40 aniversario de la Constitución española, nos invita a reflexionar sobre el papel de las constituciones y, en particular, el que ha jugado la ley fundamental española de 1978. El primer punto a considerar es la relación entre constitución y democracia.
      Todos queremos y defendemos la democracia. ¿Pero a qué tipo de democracia nos referimos? ¿La democracia simplista y formal de la “mitad más uno”? ¿O la democracia constitucional que exige mayorías cualificadas para aprobar las instituciones básicas y para reformarlas? Ese “uno” sería se me antoja presa fácil de los grupos de intereses. Podría convertirse en un dictador que nos explotara o nos volviera locos con sus continuos cambios de rumbo. La democracia constitucional es una democracia con fundamentos. Nos obliga a respetar nuestros compromisos de largo plazo. La capacidad de asumir esos compromisos, dice mucho y bien de una sociedad.
        La Constitución española de 1978, por poner un ejemplo, optó por una monarquía parlamentaria y una organización territorial basada en la autonomía de las Comunidades que integran el Estado. No excluye ni a los partidos republicanos ni a los independentistas. Simplemente les recuerda que para conseguir sus objetivos finales deben empezar por reformar la Constitución de 1978 siguiendo los pasos allí indicados. Otro tanto les recuerda a quienes preferirían una monarquía tradicional y centralizada. 
          El lastre es una parte esencial de cualquier embarcación. Los marineros que, en aras de la libertad de movimientos, prescindan del mismo pronto quedarán a merced de las olas. La Constitución es el lastre necesario para garantizar la estabilidad del sistema democrático. Lo defiende contra las veleidades de los políticos de turno. Les obliga a pensar más despacio sus pretensiones y a modularlas para asegurar el necesario consenso que se requiere para la reforma constitucional.  
La Tribuna de Albacete (19/11/2018)

lunes, 12 de noviembre de 2018

Don Ciriaco



Para entender a un obispo nada fácil que leer el lema de su escudo episcopal. El de Don Ciriaco reza así: Evangelizare Regnum Dei. Soy testigo de que en los doce años que ha servido en la diócesis de Albacete, no ha cesado de sembrar, a diestra y siniestra, la semilla del Reino de Dios, que en eso consiste la evangelización.
Mi primer encuentro con D. Ciriaco se remonta al 2012. Un grupo de profesores y estudiantes de la UCLM organizamos el foro “Universitas” que trata de llegar al fondo de los problemas socioculturales y a soluciones éticamente aceptables. Tras fijar la fecha de la primera sesión, alguien me informó del interés de D. Ciriaco por asistir. “¿Pero cómo puede un obispo participar de oyente?”, solté yo. Acordamos que dirigiera la segunda sesión sobre “Ciencia y creencia”. La cerró con una frase de Ortega y Gasset: “El conocimiento científico es exacto, pero incompleto y penúltimo”. No la he olvidado.
A raíz de esta conferencia nacieron los “Encuentros anuales del Sr. Obispo con el mundo de la cultura”. Por supuesto, la preocupación pastoral de D. Ciriaco se extiende a otros muchos campos. Cenando con un matrimonio amigo, sus hijos adolescentes no cesaban de despotricar contra los curas. “Con sermones y rezos no se arregla nada” sentenciaron. En lugar de pelearse con ellos, les invitó a acompañarle en su próximo viaje al Magreb (era el Presidente de la Comisión Episcopal de Migraciones) o a la inauguración de algún economato de Cáritas. En petit comité apostilló: “Estos jóvenes no se percatan de la importancia de la oración. Yo sí y por eso voy asiduamente al convento de las Carmelitas y les pido que recen por ellos. Sólo Dios puede ablandar los corazones para que la semilla dé el ciento por uno”. 
Muchas gracias, D. Ciriaco, por habernos evangelizado durante doce años con su voz, grave y serena. Con esos gestos sencillos que transmiten la cercanía, el compromiso y la alegría del Evangelio. 
La Tribuna de Albacete (12/11/2018)

lunes, 5 de noviembre de 2018

Un mundo feliz



Los parlamentos del mundo avanzado empiezan a colapsarse por tantas leyes de ingeniería social que asumen. Mientras revisaba los últimos proyectos legislativos de nuestro país, me preguntaba: ¿Dónde he visto yo esta película? Al final caí en la cuenta que no era una película sino una novela escrita en 1931 por Aldous Huxley: “Un Mundo Feliz”. Cuatro son las columnas sobre las que descansa el nuevo mundo.
Eugenesia. El libro empieza con un paseo por el laboratorio de la vida donde nacían los seres humanos agrupados en clases o castas. Los alfa eran blancos, listos y guapos; nacidos para mandar. Los épsilon realizaban los trabajos más sucios y, sorprendentemente, sus genes estaban programados para que disfrutaran en esas tareas.  Como no podía ser menos, en los experimentos eugenésicos había que desechar muchos embriones; también niños. Pero, ¿a quién importaban semejantes nimiedades? 
Educación como propaganda y sugestión. La clonación de los individuos de cada casta hacía más fácil el control de la sociedad. El estado completaba el control a través de un sistema educativo basado en la propaganda y la sugestión (hipnopedia, consignas repetidas mientras los niños dormían en la escuela-hogar). En su tarea educativa, el estado no admitía competidores. La familia y la iglesia fueron las primeras instituciones proscritas. Por lo visto saber, que tienes una familia que te quiere como eres y te anima a ser mejor, era un factor desestabilizador. Todavía más peligrosa era la religión y por eso, y para no dejar huecos en el paisaje, decidieron amputar todas las cruces. Desde entonces la gente realizaba la señal de la “T” en vez de la señal de la cruz.  
Droga. ¿Y si alguien alguna vez se sentía triste o desmotivado? Para eso estaba la droga (soma). El sexo era la droga más barata y la más socorrida; podía practicarse a todas horas y con todos/as. En las guarderías se enseñaban juegos sexuales desde los siete años. Si un niño sentía vergüenza, era rápidamente derivado al psicólogo.
Eutanasia. En el Mundo Feliz de Huxley nadie moría de viejo. Y nadie se acordaba de esos ancianos feos y doloridos que podían dar una nota discordante y consumir recursos públicos. Con transfusiones de sangre joven, todos se mantenían atractivos hasta los setenta años. El día que los cumplían, eran “invitados” a un hotel de lujo, tomaban una pastilla y… ¡PLAS!, se acabó la pesadilla del mundo feliz.
 La Tribuna de Albacete (5/11/2018)

lunes, 29 de octubre de 2018

Con la economía hemos topado



El lunes 5 de noviembre, el Tribunal Supremo explicará cómo sofoca el incendio desatado por la sentencia del 16 de octubre que, cambiando de criterio, carga sobre los bancos el impuesto de las hipotecas (IAJD). El Tribunal hubo de suspender temporalmente la aplicación de la sentencia pues, en unas horas, el valor bursátil de la banca había perdido 5.500 millones de euros. Por si ayudara a los magistrados, me permito transcribir mis apuntes del master de entidades de crédito que imparto.
El Banco Central fija el interés oficial en sus préstamos a la banca. Doblar el tipo oficial reduciría casi a la mitad el valor de los bonos antiguos. Consciente de este efecto redistributivo, el presidente del BC anuncia su decisión con tiempo y la aplica escalonadamente.
               La banca determina el interés de sus préstamos añadiendo al tipo oficial un margen que cubre todos los costes, incluidos los impositivos. El tipo de interés contiene también el beneficio normal que la competencia se encarga de reducir al normal que obtienen las empresas representativas de cualquier rama. Al lector incrédulo le aconsejo invertir 100 euros en un banco representativo. Al cabo de una década comprobará consternado que sus ganancias se reducen a 5 euros por año. ¡La magia de la competencia!
               Conclusión. No hay problema en cargar al banco el IAJD asociado a cada préstamo hipotecario. El banco lo trasladará al tipo de interés y punto. Lo que no es de recibo es cambiar las reglas en medio del partido.  
Consejo para los magistrados. Eliminen el carácter retroactivo de la sentencia pues beneficia a los prestatarios en perjuicio del banco prestamista y sus accionistas, amén de los futuros prestatarios que habrán de afrontar mayores tipos. Y lo que es peor, una sentencia retroactiva socava la seguridad jurídica y la confianza, dos pilares del sistema económico.
La Tribuna de Albacete (29/10/2018)

domingo, 21 de octubre de 2018

De drogas y zombis



El pasado mes de mayo entró en mi despacho Paúl, un chico joven, aunque no tanto como mis alumnos. Me explicó que vendía pequeñas macetas para sostener una fundación contra la drogadicción. “Sabe, es que yo he sido drogadicto y ahora trato de agradecerles el bien que me han hecho”. Le respondí que le compraría una planta si me respondía a una pregunta que me inquietaba. “¿Qué opinas de la propuesta de legalizar la droga para evitar las muertes que resultan de su adulteración y el narcotráfico y cosas por el estilo?”  Su respuesta fue contundente: “Mire, si yo hubiera tenido droga fácil hace tiempo que habría muerto de una sobredosis. Y si, al regresar a casa tras la desintoxicación hubiera podido comprar droga en la farmacia de la esquina yo hubiera recaído a los cuatro días”. “En realidad, concluyó, mi voluntad hacía tiempo que había muerto; solo anhelaba droga, cada vez más droga y cada vez más dura”.
Las palabras de Paúl y el olor de la hierbabuena que le compré, revivieron en mi memoria cuando escuché al líder de Podemos la semana pasada. Aprovechando la legalización del cannabis en Canadá, sugirió que España tenía la posibilidad de convertirse en un referente para toda Europa si se adelantaba en la legalización. Y que sería una suculenta fuente de ingresos para las arcas del Estado; no para comprar armas que matan sino atender a nuevos gastos sociales.
Me quedé con ganas de buscar a Paúl y llevarle al Congreso. Recordaría, a nuestras ingenuas señorías, que la droga seguirá matando físicamente a unos pocos y matará la voluntad de la creciente mayoría que se anime a probarla.
Claro, si lo que nuestras señorías buscan es crear una sociedad de zombis…
 La Tribuna de Albacete (22/10/2018)

domingo, 14 de octubre de 2018

El drama de las pensiones



¿Es viable el sistema de Seguridad Social (SS) español? –NO. La conjunción de los problemas demográficos (cada vez nacen menos niños y nos morimos más tarde) y los problemas económicos (una tasa de paro alta y errática) han hecho insostenible nuestro sistema de seguridad social.
Para haber evitado los 18.000 millones de déficit con los que acabaremos el año, se necesitarían 3,4 millones más de afiliados. Una cifra similar representaron los inmigrantes durante los doce años de auge económico (1995-2007). Hoy, casi nadie espera otro auge así, ni desea tantos inmigrantes. La alternativa para equilibrar las cuentas pasaría por una caída de las pensiones del 19%. Pero, ¿quién va a votar semejante injusticia? La tercera estrategia sería subir las cuotas a los trabajadores activos, a medida que aumenta el peso de las pensiones. No debemos olvidar, sin embargo, que las pensiones es un gravamen al trabajo y puede resultar contraproducente subirlas en el país de mayor tasa de desempleo.
Las leyes económicas acaban imponiéndose. Cuando, al inicio de la crisis, el FMI y la UE recomendaron al Gobierno griego un recorte del 25% en sus pensiones, éste se negó rotundamente y hasta amagó con abandonar la UE. Diez años después, el gasto efectivo en pensiones de nuestros vecinos ha caído un 40%. ¡Tales son los riesgos de los ajustes tardíos y mal planificados!
Las bases de una reforma realista de la SS española se sentaron en 2011 y 2013.  En abril de 2018, para conseguir los 6 votos del PNV que necesitaba, el Gobierno de Rajoy aplazó la fecha de entrada de la reforma (2019). En septiembre, el Gobierno de Sánchez aniquiló definitivamente la reforma con el beneplácito del Pacto de Toledo donde están representados el resto de los partidos. Ninguno quería jugar el papel de aguafiestas. ¡Cuánto les cuesta a nuestros políticos enfrentarse con la realidad! Ignoran que en nuestro sistema de reparto-contributivo es imposible repartir sistemáticamente más de lo que se recauda. Con las reformas actuales no hacemos más que desplazar el problema al futuro ... y a escala ampliada. Esperemos que la cordura vuelva pasados los dos años electorales que nos esperan.
La Tribuna de Albacete (15/10(2018)


domingo, 7 de octubre de 2018

El suicidio demográfico de Occidente

El “Suicidio demográfico de Occidente” fue el tema la VII Jornada Universitas celebrada el pasado viernes en el Campus de Albacete. La reducción de la natalidad y el aumento de la esperanza de vida están transformando la pirámide de población en un cilindro. Un cilindro cuya base se va estrechando por la caída de la natalidad y cuya altura crece con la esperanza de vida. El envejecimiento de la población que resulta de este cuadro genera problemas políticos y económicos, sociales y personales.
Carmen González Carrasco (Catedrática de la UCLM) habló de la importancia de la legislación para recuperar las tasas de fecundidad. Francia y los países nórdicos lo han conseguido subvencionando a las familias numerosas. El éxito de Hungría se basa en su apuesta por las madres jóvenes.
Joaquín Leguina, que además de político y escritor es demógrafo, se lamentó que las elecciones europeas de 2019 se proyecten contra los inmigrantes. El problema no está en la entrada de inmigrantes sino en su refugio en guetos cuando falla la integración. 
Emilio Chuvieco, director de la Cátedra de Ética Ambiental de la Universidad de Alcalá, matizó que los problemas ambientales no dependen tanto de cuántos somos sino de cuánto y cómo consumimos. Eso se aprende en la familia. Advirtió que los atentados contra la naturaleza (que incluye la naturaleza humana) acaban volviéndose contra la persona y la convivencia social.
Yo tuve la oportunidad de hablar del incierto futuro de las pensiones. El quid de la cuestión no radica en si las pensiones deben o no vincularse a la inflación. Lo importante es asegurar que crecen al ritmo de las cotizaciones. El cortoplacismo de los políticos es el mayor problema para encontrar las soluciones a largo plazo. Son nueve millones de pensionistas. ¡Nueve millones de votos!
La Tribuna de Albacete (8/10/2018)

lunes, 1 de octubre de 2018

Los cuarenta años previos al uno de octubre

La Constitución española de 1978 fue refrendada por el 88% de los españoles. En Cataluña la cifra rebasó el 90%. El Estatut de 1979 fue apoyado por el 88% de los catalanes. Durante muchos años los independentistas catalanes no superaban el 10% del censo electoral.  ¿Qué pasó en los 40 años siguientes para que el 50% de los catalanes abrazaran la causa independentista y renegaran de la Constitución? Pues muy sencillo: la siembra del nacionalismo excluyente a través de los medios de comunicación públicos y del sistema educativo público.
Me diréis, ¡pero también los poderes públicos de otras regiones y el propio gobierno español,  manipulan los medios y las escuelas para sus intereses electorales! Cierto. Y de ahí mi propuesta. Amarrar a los políticos cuando se adentran en la información y la educación.
En Cataluña, en Castilla-La Mancha y en el resto de España debemos asegurar la pluralidad de los medios de comunicación. Acepto que los medios públicos pueden mejorar el contenido cultural de los mismos. Pues eso, que se centren en la cultura. En los informativos y otros programas de contenido político debemos evitar que el dinero público se utilice para los objetivos del gobierno de turno.
           En Cataluña, en Castilla-La Mancha y en el resto de España debemos evitar la manipulación de la educación y eso se consigue asegurando la libertad de creación de centros educativos y la libertad de elección de los padres. Corresponde a los poderes públicos diseñar un programa general y los contenidos mínimos, comprometiéndose a financiar a todos los centros que los cumplan. No es admisible que se arroguen el poder de regular el currículum educativo hasta los mínimos detalles y de obligar a los escolares a cursarlo en “sus” centros públicos.  Si un centro público desea predicar la ideología del nacionalismo excluyente o la ideología de género lo mismo que puede hacer es respetar la libertad de que algunos padres lleven a sus hijos a otros centros.
La Tribuna de Albacete (1/10/2018)

lunes, 24 de septiembre de 2018

¿Qué hizo diferente a la crisis de 2008?

Estamos recordando (y todavía sufriendo) el décimo aniversario de la crisis de 2008, sólo superada en dureza por la de 1929. Las crisis financieras son una enfermedad endémica a las economías capitalistas. Los bancos son los primeros interesados en la expansión crediticia, en eso consiste su negocio. Pero crédito implica deuda y la calidad de ésta se va deteriorando a medida que aumenta. Cuando la fruta está madura, una elevación del tipo de interés o la quiebra de una institución financiera puede precipitar una crisis general.
Hyman Minsky, un experto en estos temas, concluyó que el ciclo del crédito/deuda se repetía cada 20 ó 25 años. La peculiaridad de la crisis de 2008 es que el proceso tomó una velocidad de vértigo por la connivencia entre la banca tradicional y la banca a la sombra, en el nuevo esquema bancario de “originar para distribuir”. La primera multiplicó el dinero a base de créditos hipotecarios, cada vez de menor calidad. La segunda, una vez esquivada la regulación bancaria, transformó las hipotecas basura en productos financieros de gran liquidez y bajo riesgo. En realidad, los riesgos eran enormes, pero estaban disimulados tras los nuevos y sofisticados derivados crediticios. 
            Tres son lecciones que debiéramos haber aprendido de la crisis de 2007-08. Primera, la regulación bancaria es más importante que nunca; la “banca a la sombra” resulta inaceptable. Segunda, no debe concederse créditos a la compra de activos financieros. Aunque no sea posible extirpar la especulación, no debemos tolerar que se financie con créditos baratos. Tercera, la expansión crediticia debe ir acompañada de mayores dotaciones de capital que suministren un colchón de seguridad y obliguen a los directivos bancarios a ser más responsables. 
La Tribuna de Albacete (24/09/2018)

lunes, 17 de septiembre de 2018

Diez años después de Lehman Brothers



El 15 de septiembre de 2008 es una de las fechas negras de la historia financiera. La caída de Lehman Brothers, el cuarto banco de inversión de los Estados Unidos, arrastró a otras muchas entidades (financieras y no financieras) a lo largo y ancho del planeta.   
España fue una de los países más afectados… y lo sigue siendo. Entre 2008 y 2018 el sistema bancario español perdió el 40% de sus oficinas y el 30% de sus empleados. Las cajas de ahorro, uno de los rasgos distintivos de nuestro sistema financiero, pasaron a la historia.
En 2007 presumíamos de tener saneada la hacienda pública con un 2% de superávit presupuestario y un 35% de deuda (en términos del PIB). En 2009 el déficit llegó al 10% y todavía sigue por encima del 3%. A pesar de las políticas de austeridad,  la deuda pública ha seguido creciendo hasta representar el 100% del PIB. Es más fácil endeudarse que desendeudarse, sobre todo cuando te exigen una prima de riesgo.
La tasa de paro es el mejor indicador del sufrimiento infligido por las crisis económicas. En 2007 habíamos logrado situarla en la media europea (8,5%). Se disparó con la crisis hasta llegar al 26% en 2009. Desde entonces ha bajado lentamente. Hoy supone el 16%, el doble de la UE.
Diez años después de la caída de Lehman Brothers continúa la resaca en algunos países intoxicados por exceso de crédito. A la vista de los datos anteriores, resulta grotesco culpar a los americanos de todos nuestros males. Es hora de poner la lupa en el sistema económico español y en la política económica de nuestros gobernantes (y los de la UE). Necesitamos empresas más competitivas e innovadoras. Un sistema financiero que dé preferencia a las inversiones productivas. Y un sector público más delgado y eficiente.
La Tribuna de Albacete (17/09/2018)

lunes, 10 de septiembre de 2018

Cadenas y raíces


“Hijo, rompe tus cadenas, pero no cortes tus raíces”. Oí esta máxima en mi juventud de labios de una persona sabia. No la he vuelto a escuchar ni he podido rastrear su origen en internet. Pero me sigue pareciendo un pensamiento certero. La Feria de Albacete parece una ocasión propicia para rememorarla.
Las cadenas esclavizan. Después de muchos siglos campeando a sus anchas, la esclavitud ha sido felizmente abolida. Los remanentes que todavía colean en algunos rincones acabarán por extinguirse si la repulsa social se mantiene firme. Lamentablemente hay una esclavitud interior que goza de salud y admiración social. Las cadenas más difíciles de apreciar y romper son precisamente las que uno mismo va urdiendo con sus comportamientos viciosos aplaudidos por los demás. Es esclavo quien está dominado por la ira o se engancha a las drogas o no sabe vivir un día sin internet.
Las raíces fundamentan y alimentan. Las fiestas patronales vivifican nuestras raíces comunes con familiares y amigos. Nos recuerdan las bases cristianas de la cultura europea que a tantas personas han ayudado a erradicar vicios y cultivar virtudes. La Feria de Albacete, que estamos celebrando en honor a la Virgen de los Llanos, ilumina las virtudes más necesarias en esta sociedad tan pretenciosa como falsa. Los “llanos” evocan esa simplicidad de vida que es lo contrario de la doblez de corazón y del postureo. Y esa humildad por la que Dios enalteció a la Virgen y dispersó a los soberbios de corazón.
Raíces y cadenas acaban siendo incompatibles. Quien pierde sus raíces fácilmente acaba esclavizado a sus vicios personales y a las modas sociales. No faltará quien haga ostentación de sus cadenas de oro. ¡Cadenas, al fin y al cabo!

La Tribuna de Albacete (10/09/2018)

lunes, 3 de septiembre de 2018

Una mirada a Europa


Me gusta aprovechar las vacaciones de verano para leer algún libro de esos que “tocan fondo”. Un amigo me pasó “Una mirada a Europa” de Joseph Ratzinger, futuro Papa Benedicto XVI. El libro recoge conferencias pronunciadas en 1989 y publicadas por Rialp en 1993.  Para el autor, los males crónicos de la Europa de la “modernidad” son los nacionalismos, la pérdida valores éticos y las utopías populistas.
Los nacionalismos cumplieron una importante misión integradora en el siglo XIX. Pero el nacionalismo es una materia fácilmente inflamable que azuzó casi todas las guerras europeas, incluyendo las dos guerras mundiales. La Unión Europea es el mejor antídoto a este nacionalismo basado en el odio al vecino. No está claro, sin embargo, que sobreviva a las tendencias tribales.
Los países europeos acogieron con fervor la Declaración de los Derechos Humanos de 1948 donde se proclaman el derecho a la vida, la igualdad y la libertad. Lamentablemente, el Estado pronto se arrogó la potestad de decidir dónde empieza y acaba la vida humana y de separar los temas sobre los que se puede opinar libremente de los temas protegidos bajo el paraguas de lo políticamente correcto. El relativismo moral ha dado alas al positivismo jurídico que otorga a las cambiantes mayorías parlamentarias el poder de definir lo que hoy es justo y moral.
Tampoco ayudan las promesas de un cielo en la tierra por obra y gracia de la tecnología, el crecimiento económico y un Estado benefactor. Tales promesas ahogan la iniciativa privada, desprestigian el esfuerzo personal y generan frustración social.  La utopía marxista cayó con el Muro de Berlín en 1989. Pero, como el ser humano tiene necesidad de utopías, otras corrientes populistas seguirán predicando el cielo en la tierra.
Lúcido análisis, el de Ratzinger. Lo único que deseamos añadir treinta años después es que estos tres torpedos que amenazan el proyecto de la Unión Europea han ganado potencia con el paso del tiempo.

La Tribuna de Albacete (3/9/2018)

domingo, 29 de julio de 2018

Libre movimiento de capitales


El drama de la inmigración sigue rasgando nuestras retinas. El viernes llegaron a las costas próximas al Peñón de Gibraltar 627 personas en 35 pateras. Los inmigrantes salieron corriendo antes de que llegara la policía. Los bañistas aprovecharon para hacerse selfies solidarias.
La solución al a la inmigración masiva y desesperada pasa por la inversión productiva en África y la libre exportación de los bienes que sean capaces de producir. Ninguna de las dos condiciones se da en estos momentos. Occidente predica el libre comercio, pero lo restringe allí donde tiene algo que perder; en la agricultura, por ejemplo. El capital se mueve a la velocidad de la luz, cierto, pero solo un 10% se destina a actividades productivas y nunca llega a los países más pobres que, por definición, carecen de las infraestructuras necesarias para el desarrollo.
La ayuda al desarrollo es imprescindible para romper el círculo vicioso del subdesarrollo. En los objetivos del milenio (ONU, 2000) se acordó destinar un 0.7% de la renta a estos fines. La crisis de 2008 barrió las buenas intenciones. La alternativa sería introducir un impuesto sobre transacciones financieras, la conocida “tasa Tobin”. Siendo que estas transacciones son muy superiores al PIB mundial, bastaría un tipo del 0.025% para asegurar a todos los países del Tercer Mundo los fondos que necesitan para construir y mantener las infraestructuras del desarrollo. También para ofertar una educación y sanidad básicas. El objetivo final es crear las condiciones para que emerjan emprendedores y técnicos indígenas. Ellos son quienes multiplicarán la riqueza y los puestos de trabajo. Quizás algún día agradezcamos que nuestros hijos o nietos puedan encontrar empleo en el Tercer Mundo.
La Tribuna de Albacete (30/07/2018)

domingo, 22 de julio de 2018

Libre movimiento de personas



El lunes pasado hablábamos de las restricciones al comercio de bienes que generalmente desembocan en “guerras comerciales”. Hoy vamos a hablar de las restricciones al movimiento de personas y del drama que representa cada patera hundida en el Mediterráneo. ¡El drama de nuestro tiempo! Ambas noticias están relacionadas. Si no ayudamos a los africanos a producir y exportar lo que producen, acabarán viniendo ellos mismos por tierra, mar o aire. El hambre ha sido el motor de la historia… y lo sigue siendo.
La emigración es un problema complicado. No lo vamos a negar. Los Estados están en su derecho de exigir ciertos requisitos y poner límites cuantitativos a la inmigración. Pero hemos de ser conscientes que por esta vía es imposible llegar a las raíces del problema. Tratándose de un problema global, la comunidad internacional debe buscar soluciones globales.
Los problemas se magnifican cuando los emigrantes se ven abocados a saltar al país más cercano, sin importarles la dificultad de encontrar empleo allí. Si un país se muestra más compasivo, provocará un efecto llamada que puede socavar las bases de su economía, el sistema sanitario y educativo y hasta el orden público. Haciendo cifras concluimos, sin embargo, que las personas que no encuentran trabajo en el Tercer Mundo podrían ser absorbidas y asimiladas por los países en crecimiento (China incluido). Si todos los países aceptaran el cupo que les corresponde en función del tamaño de su población activa y parada, la asimilación de los emigrantes sería un problema resoluble. Los inmigrantes, que de tontos no tienen un pelo, acudirían allí donde haya posibilidades de trabajo.
Los flujos migratorios han sido una constante de la historia de la humanidad. Los movimientos masivos de personas tienen algo de dramático y de esa tensión surgen fuerzas positivas. La novedad de nuestra era es presentar estos flujos como algo malo e irresoluble, la madre de todos los problemas. La globalización, del que la inmigración es una parte sustancial, ha convertido nuestro glorioso estado-nación en una sociedad multicultural. La convivencia en la diversidad no es fácil. Pero no nos engañemos pensando que nuestros principales problemas vienen de fuera. España, Europa y los EE.UU. han demostrado repetidamente que para masacrarse en guerras civiles o internacionales no necesitan la mecha de la inmigración.
La Tribuna de Albacete (23/07/2018)   

domingo, 15 de julio de 2018

Libre movimiento de bienes


En 1906 el economista Leon Walras se auto-nominó candidato al Premio Nobel de la Paz. La mayoría de las guerras habían empezado por el proteccionismo comercial y él había demostrado matemáticamente que el libre comercio resultaba ventajoso para todos. Walras es un eslabón más de la cadena que ha unido a la mayoría de los economistas (¡y mira que es difícil!) desde que Adam Smith demostrara en 1776 que la economía no es un juego de suma cero, donde uno sólo puede ganar a costa de otro. El empresario que exporta, contribuye a la creación de riqueza y empleo por doquier.
La edad de oro del capitalismo que siguió a la Segunda Guerra Mundial tiene mucho que ver con el esfuerzo por reducir aranceles a través de los acuerdos auspiciados por la GATT. Fue un proceso lento, país a país, producto a producto. Se sustituyó en 1995 por la OMC que ha seguido avanzado a pasos cortos pero continuos.
Así hasta que Donald Trump llegó a la Casa Blanca en enero de 2017. Nos equivocamos quienes pensamos que sus proclamas proteccionistas no saldrían del programa electoral. En el último mes ha declarado la guerra comercial a China en productos de alta tecnología. China sería el origen de todos los males de la economía norteamericana. Pero no piensen ustedes que sus amigos tradicionales han salido mejor parados. Como aperitivo a sus viajes internacionales, Trump afirmó que el tratado comercial con Canadá y Méjico (NAFTA) había dejado de ser útil para los EE.UU. Y otro tanto ocurría con el programa de supresión total de aranceles entre EE.UU y la UE para unos productos seleccionados. America first!
Como era de esperar, los gobiernos de los países amenazados se han puesto en pie de guerra y han amenazado con recuperar la vieja ley del Talión: “Ojo por ojo, diente por diente”. ¿Volveremos a las cavernas?

La Tribuna de Albacete (16/07/2018)

domingo, 8 de julio de 2018

Moción al Cuarto Poder

En la primera semana de julio el termómetro del Congreso de los Diputados alcanzó cotas solo comparables a las de una moción de censura. El PSOE coló la propuesta en el hemiciclo a través de un decreto-ley contra el que el PP formuló inmediatamente un recurso de inconstitucionalidad. La portavoz del PSOE, Adriana Lastra, celebró la recuperación de la independencia y el pluralismo en RTVE tras la negra etapa del PP. El popular Ramón Moreno lo tachó de “decretazo redactado por Podemos al más puro estilo bolivariano”.  
¿Le extraña al lector tanta pasión por una simple renovación de cargos? A mí no. El 1 de junio culminó la moción de censura para destituir al líder del poder ejecutivo. El 1 de julio empezó la moción de censura para hacerse con el cuarto poder de un estado moderno, el de los medios de comunicación.
Si aceptamos que el control de la información que beben los ciudadanos-electores constituye un auténtico poder, habrá que buscar los medios para asegurar su independencia. Lo primero es garantizar la libertad de expresión que conlleva la libertad de empresa en el sector audiovisual. Algo hemos avanzado en este camino. Lo segundo, asegurar la neutralidad de los medios públicos de comunicación, los que viven del dinero de los contribuyentes. Para ello resultan aconsejables mandatos largos y renovables por partes. Ellos elegirían al director entre sus miembros con acreditada experiencia en el mundo audiovisual. Éste comparecería anualmente ante el Parlamento para responder a las legítimas dudas sobre eficacia, transparencia e independencia que diputados y senadores puedan tener.   
Buena noticia si los políticos se enteraran por la prensa del cambio de director.  Si se demostrara que la neutralidad política en los medios audiovisuales resulta poco menos que imposible, todavía quedaría la opción de prescindir de ellos. Es lo que ha ocurrido con la prensa y no parece que vaya tan mal. 
La Tribuna de Albacete (09/07/2018)

lunes, 2 de julio de 2018

El mundial de fútbol: una gota de romanticismo en un negocio globalizado


Estos días, en que todos hablamos de fútbol y todo nos habla de fútbol, pueden ser aprovechados para tocar el fondo de este deporte que mueve a las masas en todas las latitudes. El fútbol es, ante todo, un negocio y un negocio globalizado. Por mucho que hablemos de una economía global y de políticas internacionales, todavía no hemos sido capaces de encontrar un ente cuyas decisiones vinculen a todos. El reglamento de la FIFA, por el contrario, se impone a todos los futbolistas, jueguen donde jueguen. Se hace difícil pensar que un club, por muy poderoso que sea o por mucho apoyo democrático que exhiba, se atreva a romper unilateralmente esas normas.
Quien desee palpar la globalización del fútbol no tiene más que revisar la plantilla del Barça o del Real Madrid. ¿Encontraremos en sus plantillas algún futbolista nacido en Barcelona o Madrid? Las ligas nacionales se quedan pequeñas. La Champions se convertirá pronto en la primera división europea. Con el tiempo la máxima categoría de fútbol se jugará a escala mundial. Las guerras a balazos se cambiarán por guerras a pelotazos aderezadas de algún que otro insulto.
El mundial de fútbol que se juega estos días, es la excepción que confirma la regla. Una concesión a los sentimientos nacionales que todos llevamos dentro y nos permiten hacer piña con los vecinos. Tampoco las selecciones nacionales son inmunes al virus empresarial. Lo apreciamos en las facilidades para la nacionalización que se conceden a los deportistas de élite. Sea como fuere, haremos bien en mantener esa gota de romanticismo que nos une a todos los españoles, franceses, rusos… un mes cada cuatro años.
La Tribuna de Albacete (02/07/2018)

lunes, 25 de junio de 2018

Las arenas movedizas de la deuda



Si quieres entender la trampa de la deuda no tienes más que mirar a Grecia. Déficit recurrentes por encima del 6% mantuvieron la deuda soberana en el 100% del PIB a pesar del auge económico (1995-2006). Con la crisis del 2008 cayó el nivel de renta que aparece en el denominador y el cociente se elevó hasta el 180%. Ahí sigue. Si quieres entender las malas soluciones al problema de la deuda, Grecia vuelve a ser el mejor ejemplo. Rescate en el año 2010 a cambio de políticas de austeridad extrema: elevación de tipos impositivos, reducción del gasto, endurecimiento de la política crediticia hacia las empresas. Como la recesión seguía su curso y la recaudación impositiva cayó en picado, hubo de acordarse un segundo rescate en 2011 y un tercero en 2015.
La trampa de la deuda se asemeja a las arenas movedizas. Una vez que has caído en ellas se hace muy difícil escapar, a no ser que un agente externo y fuerte te ayude. Este agente no podía ser otro que la UE. El jueves pasado la UE decidió cambiar su estrategia de rescates. En lugar de lanzar una cuerda al cuello del deudor lanzó una plataforma que le permitirá ayudarse a sí mismo. Al menos eso es lo que queremos creer. Autorizó una quita de deuda por importe de 15.000 millones que transfiere parte del asunto a la banca alemana que hasta el momento había salido de rositas. Creó un fondo de 24.000 para cubrir problemas puntuales de liquidez. Y lo más importante, se levantaron todas las restricciones que impedían a Grecia desarrollar una política económica autónoma y acudir a la financiación del BCE.
En la solución de cualquier crisis es importante que cada uno asuma sus responsabilidades, pero no hasta el punto de ahogarle económica y financieramente. No tiene sentido obligar a Grecia a aumentar los tipos impositivos que desangrarían a su débil tejido empresarial. No tiene sentido impedirle acudir al BCE y disfrutar de los créditos baratos de los que gozan el resto de gobiernos de la UE. De todas maneras, el mensaje fundamental ha de quedar claro para los griegos: el crédito solo es útil cuando es capaz de impulsar la inversión productiva.
 La Tribuna de Albacete (25/06/2018)

domingo, 17 de junio de 2018

Fábrica de burbujas


En mis clases de Economía Monetaria y Bancaria he pasado muchos años remarcando las líneas rojas que un Banco Central (BC) no debía sobrepasar, so pena de cargarse el sistema financiero. Tenía prohibido prestar a las empresas. Al Gobierno, solo podía prestar en pequeñas cuantías y de forma indirecta, a través de la compra de deuda pública en el mercado abierto. El crédito directo a la banca privada era otra vía de regulación monetaria. Se otorgaría en pequeñas cantidades y a un interés moderadamente positivo para evitar una expansión descontrolada del dinero bancario.
Desde el año 2014 las líneas rojas se han convertido en autovías convencionales y yo he debido quemar mis apuntes. Siguiendo la estela de la Fed americana, el BCE relajó en 2014 su política monetaria hasta límites insospechados. En los tres últimos años, ha creado 2.5 billones de euros (más del doble del PIB español) para comprar deuda emitida por gobiernos y grandes empresas. El tipo de interés oficial bajó a cero en 2014, y ahí sigue. La novedad que Mario Draghi y Luis de Guindos anunciaron la semana pasada es que el plan de estímulo monetario se prolongará una vez más pero sólo hasta diciembre del 2018, y que desde septiembre ya no se prestarán 30.000 millones al mes, sino 15.000.
Tamaño estímulo monetario ha supuesto un colchón de oxígeno para el Gobierno y la banca. ¿Habrá logrado su objetivo básico, hacer despegar a la economía productiva? ¡NO! Más bien la ha anestesiado. Quien sí se ha despertado es la economía especulativa. En EE.UU. la inflación de activos (mercado bursátil e inmobiliario) ya está por encima de los niveles explosivos alcanzados en 2007. En UE avanzamos aceleradamente hacia el precipicio. Quizás hemos de aceptar que la economía de los países avanzados se ha convertido en una fábrica de burbujas.
 La Tribuna de Albacete (18/06/2018)

domingo, 10 de junio de 2018

Políticas de empleo y empleo de políticos



Para quienes consideramos que el desempleo es uno de los mayores problemas de España, si no el mayor, la semana pasada fue muy esperanzadora. El flamante Presidente de Gobierno nombró a sus 17 ministros. La primera plantilla del nuevo equipo político pasó de 13 a 17 jugadores. Pese a lo que pudiera parecer, el empleo aumentó en un número más cercano a 17 que a 4. Los ministros cesantes pasaron a ser jugadores en la reserva. Disfrutarán del sueldo completo durante un tiempo y luego les quedará una renta vitalicia que ya les gustaría a muchos jóvenes.
La semana entrante también promete ser buena para el empleo. Cada ministro elegirá a sus altos cargos: secretarios generales, subsecretarios, directores generales… Muchos de los cesados también disfrutarán de privilegios de por vida. Su complemento de destino ya no será el que le correspondía como funcionario raso sino el de director general.
“¡Pero eso ha pasado siempre!”, me dirá el lector crítico. Sí y no. Antes, el relevo de las plantillas tenía lugar cada cuatro años. La novedad del multipartidismo beligerante en el que nos hemos instalado ahora es el acortamiento de los plazos de relevo. Esto significa que el número de personas cobrando como altos cargos políticos (sueldos o pensiones) puede multiplicarse por dos, tres o cuatro.
Estas cifras empiezan a ser significativas al multiplicarlas por las 17 comunidades autónomas y por el centenar de grandes municipios y por los miles de organismos públicos en unas y otros. El problema de la inestabilidad política que acelera el cambio de plantillas es común a todos ellos.
¡Curiosa manera de solucionar el problema del paro! En lugar políticas de empleo estamos ensayando maneras alternativas de emplear a las hordas inagotables de políticos y aspirantes a políticos.
La Tribuna de Albacete (11/06/2018)


lunes, 4 de junio de 2018

Moción o paralización


¿Qué lecciones hemos aprendido después de dos mociones de censura  en apenas un año? Mi conclusión: la inexistencia de una mayoría parlamentaria que respalde al Gobierno lleva a la inestabilidad política, impide gobernar con eficacia y socaba la responsabilidad de los políticos, columna de la democracia. Nuestro sistema electoral no favorece la responsabilidad de los políticos y las mociones de censura, en lugar de promoverla, la paralizan. En las próximas elecciones tanto el PP como el PSOE justificarán su inanición y contradicciones por la falta de tiempo o de respaldos parlamentarios. ¡Y vuelta a empezar!
                Quienes pensaron que gobiernos en minoría favorecían el diálogo habrán comprobado lo poco que da de sí esta palabra. El orador de turno se dedica a insultar a los adversarios desde la tribuna. Estos tienen dos opciones: o bajar la cabeza para mirar su maravilloso ombligo o levantarla para mostrar una sonrisa desafiante de cartón piedra.
Seamos realistas, dado el nivel de ensimismamiento al que ha llegado la especie humana, lo mejor que podemos hacer es dejar gobernar durante cuatro años al partido o coalición que ganó las elecciones. A la oposición le corresponde poner al descubierto los errores y trampas de los gobernantes. Cuatro años después, serán los propios ciudadanos quienes decidan si el partido gobernante merece un nuevo voto de confianza o es preferible mandarlo a la calle.  
Los medios para conseguir un gobierno eficaz y responsable están al alcance de la mano… si hubiera voluntad política para estirarla. Un sistema electoral que asegure la representación proporcional de los partidos que obtengan un mínimo de votos. Una prima en escaños al partido que supere el 40% asegurándole la mayoría que necesita para gobernar con eficacia. O una segunda vuelta entre las dos fuerzas más votadas, en caso de que ninguno llegara a ese umbral. Las otras fuerzas habrían de pactar acuerdos y escaños con el partido al que decidan sumarse. Las discordias en las coaliciones no tardarían en surgir, como ocurre hoy en el seno de cada partido. Pero estas turbulencias no desestabilizarían la política nacional ni eximirían de responsabilidad al partido que lidera la coalición.

La Tribuna de Albacete (4/06/2018)

domingo, 27 de mayo de 2018

Mayo del 68, Por sus líderes lo conoceréis



Mayo del 68 inaugura la época del populismo desenfadado. Los estudiantes que tomaron la Sorbona y las calles del Barrio Latino de París, pidieron el cielo en la tierra. Muchos profesores y políticos les dijeron que sí, que se lo merecían y que era posible. Tras la resaca, les abandonaron a su propia suerte. ¿Cuál fue la suerte de aquellos jóvenes revolucionarios? El repaso de los 50 años que nos separan de Mayo del 68 será, sin duda, un buen ejercicio de realismo político y cultural.
Daniel Cohn-Bendit (“Dani el Rojo”) fue el líder indiscutible de la movida hasta que las autoridades académicas y políticas se hartaron de él y le ofrecieron un exilio dorado en Alemania, su país natal. Allí organizó un sistema de “guarderías alternativas”, convencido que la revolución solo triunfaría cambiando el sistema educativo desde sus primeras etapas. Las prácticas que cuenta en su libro “Le gran bazar”, hoy serían condenadas por apología de la pederastia. Lo reconoce el mismo Daniel Cohn, que en los últimos años se ha moderado hasta apoyar explícitamente a Emmanuel Macron.
Jacques Sauvageot se desencantó de la política mucho antes y opositó a una cátedra de Historia del Arte en un liceo. Alain Geismar siguió en política hasta ser consejero del Partido Socialista. Alain Krivine es el único estudiante cuyos anhelos revolucionarios no se desvanecieron con el paso del tiempo.  Su última apuesta ha sido por el Nuevo Partido Anticapitalista.
Michel de Foucault fue el líder de mayor talla intelectual. Desde su cátedra de Filosofía en el prestigioso Collège de France trató de fundamentar el feminismo radical y de desmontar las ideas y los hechos que lo ponían en tela de juicio. El sida, por ejemplo, no sería más que un invento de la Iglesia católica para desprestigiar la homosexualidad. Lo siguió pregonando hasta el día de su muerte. Murió a los 46 años … de sida.

La Tribuna de Albacete (28/05/2018)

domingo, 20 de mayo de 2018

Mayo del 68 en sus grafitis



Cincuenta años han transcurrido desde Mayo del 68. Un repaso de los grafitis pintados en las calles París nos ayudarán a entender el significado de aquella revolución estudiantil que pretendía poner el mundo patas arriba. El espacio del que dispongo solo da para copiar los grafitis de aquellos estudiantes anónimos. Confío al lector la tarea de valorarlos y reírse (si procede).
Los alumnos de la Universidad de Nanterre y de la Sorbona resaltaron el carácter cultural y ético de su revolución. Su objetivo principal era romper los moldes impuestos por los poderes fácticos del pasado y del presente. “Sexo libre”. “Prohibido prohibir”. “Creatividad, espontaneidad, vida”. “No queremos un mundo donde la garantía de no morir de hambre se cambia por el riesgo de morir de aburrimiento”. “Un policía duerme en cada uno de nosotros. Es necesario matarlo”. “Lo sagrado, ahí está el enemigo”. “La sociedad es una flor carnívora”. “Civismo rima con fascismo”.
Proponen la democracia directa liderada por la imaginación de aquellos jóvenes y sabios estudiantes que se adueñaron de las calles. “La imaginación al poder”. “Seamos realistas, pidamos lo imposible”. “Decreto el Estado de Felicidad Permanente”. “Mis deseos son la realidad”. “La calle vencerá”. “Viva la democracia directa”. “Exagerar, esa es nuestra arma”. “La insolencia es la nueva arma revolucionaria”.
Detrás de estas proclamas se vislumbra un modelo marxista que empieza a criticar a Lenin y Stalin para apoyar a Trotsky y Mao. Pero la economía no puede imponer límites a sus magníficos planes. “No negociéis con los patrones, abolidlos”. “El patrón te necesita, tú no necesitas al patrón”. “Ni robot ni esclavo”. “La economía capitalista está herida. ¡Que reviente!”
Para acabar unas palabras sobre educación. Procediendo de estudiantes universitarios seguro que esconden una sabiduría profunda. “En los exámenes responda con preguntas”. “Examen = servilismo; promoción social = sociedad jerárquica”. “Olvídese de todo lo que ha aprendido, empiece a soñar”. “Profesores, ustedes nos hacen envejecer”.

La Tribuna de Albacete (21/05/2018)

domingo, 13 de mayo de 2018

Cultura del descarte y de la muerte


El pasado jueves el Congreso español aprobó tramitar una proposición de ley para la despenalización de la eutanasia. Esperemos que no pase de “propuesta”. En caso de que algún día se convierta en ley, podemos esperar un derrotero similar al que ha seguido la legislación abortista. Empezaron justificando el aborto como una excepción a un derecho fundamental del ser humana, solo justificada por graves problemas en la salud de la madre. Acabó convirtiéndose en una técnica más de control de natalidad elevada a la categoría de derecho fundamental.
         Los defensores de la eutanasia presentarán casos extremos y los resolverán con argumentos lacrimógenos, de esos que ahogan la capacidad de pensar. Ocultarán deliberadamente que nadie defiende el encarnizamiento terapéutico; que los enfermos terminales van a morir a sus casas con los analgésicos necesarios; que quienes padecen fuertes depresiones tienen derecho a ser ayudados, no penalizados y, mucho menos, animados al suicidio.
Con una ley de eutanasia el Parlamento abrirá una pequeña brecha con la confianza (disimulada) de que la sociedad y la práctica jurídica la amplíen hasta convertirla en un agujero negro capaz de engullir todo, incluidos los abusos más deleznables. En una sociedad envejecida, la eutanasia es la coartada perfecta para eliminar a las personas que reportan un coste excesivo para el erario público o una espera insoportable para los herederos. “Los afectados han de consentir”, dirán. Vale, pero, ¿y si ya tienen demencia? ¿y si son unos bebés que no pueden calcular los enormes sufrimientos que les acarreará un defecto físico? No especulo. En Bélgica, la eutanasia infantil ya existe.
La eutanasia representaría un hachazo a la Constitución. Mientras su artículo 14 proclama el derecho a la vida los políticos se toman la prerrogativa de decidir cuándo empieza y acaba esa vida. La eutanasia es un lastre que inclina la balanza social hacia la cultura del descarte y de la muerte.
La Tribuna de Albacete (14/05/2018)

domingo, 6 de mayo de 2018

Fuera de juego y fuera de campo



Hace exactamente un año, Podemos presentó la Proposición de Ley sobre igualdad social de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transgénero e intersexuales. Esta propuesta, elaborada por el propio colectivo LGBTI, aspira a liderar la transformación social y moral del siglo XXI en el planeta Tierra. Introduce el derecho fundamental a la “autodeterminación humana” que nos obliga a tratar a cada uno según del género con el que se identifica, género que puede variar por un cambio de sexo o un cambio de humor. Nadie, ni siquiera los padres, pueden oponerse a estas prácticas o criticar la ideología de género que hay detrás so pena de fuertes sanciones. Por todos los medios a su alcance, en especial a través del sistema educativo, los poderes públicos quedan obligados a promover esa ideología.
La semana pasada se publicó el informe preceptivo de los letrados del Congreso. ¡Devastador! Descalifica jurídicamente 37 de los 90 artículos de la Proposición LGBTI. Con la excusa de crear un nuevo derecho, dicen los letrados, se machacan otros derechos fundamentales que sí están en la Constitución: libertad de pensamiento, libertad de expresión y derecho/deber de los padres a ejercer la patria potestad y tomar decisiones en la educación moral de sus hijos. La seguridad jurídica pierde su base cuando el género queda al albur del sentimiento. Lejos de evitar discriminaciones, la ley otorga unos privilegios al colectivo LGBTI que atentan contra la igualdad. Con una ley así, ¿quién no se apuntará al colectivo LGBTI?
El informe de los letrados no es vinculante. Podemos lo ha descalificado como retrógrado y confía que la mayoría progresista del Congreso sacará adelante la propuesta LGTBI. Antes de votar, los parlamentarios habrán de preguntarse quién progresa al torpedear la Constitución desde sus cimientos, desde el artículo 1.1 que “propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico, la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político”. Personalmente me inclino por retirar una propuesta que los letrados han declarado en fuera de juego. “Fuera de campo”, habría que decir. Además de contrariar el ordenamiento jurídico, ignora la propia naturaleza humana. Por favor, ¡basta ya de hacer experimentos con los niños!

La Tribuna de Albacete (07/05/2018)

domingo, 29 de abril de 2018

Mayorías y mayorías



    Según sus defensores, el punto fuerte del independentismo catalán radica en el apoyo entusiasta y pacífico de la inmensa mayoría del pueblo catalán. El punto débil lo encontramos en la falsedad de tal afirmación. El voto independentista no ha pasado del 48% del censo. La magia de la ley electoral eleva esa cifra al 52% de los escaños. ¿Suficientes para hablar de esa “inmensa mayoría” que justifica la independencia por simple lógica democrática?  
   La legislación juega con diferentes mayorías según la trascendencia de la ley a debate. Para las leyes más trascendentes rigen mayorías cualificadas. El Estatut de Cataluña, por ejemplo, exige dos tercios (67%) del Parlament para cambiar la norma electoral o el propio estatuto de autonomía.
¿Qué mayoría habría de concertar una propuesta de independencia que implica la derogación del Estatut y la Constitución española? Tres cuartos (75%) del Parlamento regional parece una cifra razonable. Solo con un porcentaje así de alto, los independentistas estarían legitimados a hablar en representación de la inmensa mayoría de los catalanes. Solo con ese porcentaje, podrían conseguir el apoyo de grupos nacionales no independentistas, imprescindible para iniciar la reforma constitucional. Solo con ese porcentaje, se evitaría el riesgo de que la mitad del territorio catalán pida la secesión al día siguiente de proclamarse la República catalana; o que el bloque no independentista gane las próximas elecciones al Parlament.
Personalmente, no tendría inconveniente en tender un puente de plata a un partido independentista respaldado por el 75% de su electorado. Solo le pediría que, en el largo camino que le espera hasta conseguir ese porcentaje, renunciara a utilizar el sistema educativo y los medios de comunicación públicos como arietes proindependentistas. ¡La verdad, la igualdad y la libertad siempre por delante!


La Tribuna de Albacete (30/04/2018)

domingo, 22 de abril de 2018

Deslealtad y 155



                La historia da perspectiva y la perspectiva nos permite fundar mejor nuestras decisiones. Apenas dos años median entre el día que la Generalitat y el Parlament optaron por la vía unilateral a la independencia y su consumación en la declaración de la República Independiente de Cataluña. Tiempo breve, pero suficiente para comprender que se trató de un auténtico golpe de estado, es decir, de la sustitución de la legalidad vigente al margen de la Constitución. No hubo violencia física pero sí desobediencia y deslealtad institucional a raudales.
El Gobierno optó por una respuesta de perfil bajo. Esperaría pacientemente hasta que se cometieran actos delictivos y los recurriría uno tras otro ante el Tribunal Constitucional. La judicialización del Procés le obliga ahora a respetar las decisiones de los jueces, gusten o no gusten.
         Lo que sí está en manos de los políticos es evitar un segundo Procés cuyos efectos ya nos resultan conocidos. Es la hora de la política. Es el momento de tomar decisiones ejecutivas que impidan la desobediencia flagrante e impune a las leyes y sentencias. De impedir que se utilice el dinero de todos los catalanes para la causa independentista abanderada por la mitad de ellos. De evitar que las instituciones catalanas gestionen sus competencias para poner palos en las ruedas del Estado español. De impedir que la deslealtad institucional campe a sus anchas, generando un ambiente de crispación irrespirable.
La deslealtad institucional puede compararse a ese compañero de equipo que te pone el dedo en el ojo cada vez que se cruza contigo. El entrenador no puede pitarle penalti, pero sí retirarlo a otra zona del campo menos transitada y menos decisiva. Solo por un tiempo, hasta que se serene y decida volver a aceptar las reglas del juego, amén de la lealtad con sus compañeros. En eso consiste el 155. Para aplicarlo no hace falta esperar a que el partido esté perdido.
 La Tribuna de Albacete (23/04/2018)

domingo, 15 de abril de 2018

Pensiones e inflación



La reforma del sistema de las pensiones se ha encallado en un problema aparentemente menor: la inflación. ¿Deberían subir automáticamente las pensiones cuando la inflación sea positiva? Pensaremos en la respuesta a la luz de cuatro criterios: (1) Bienestar de los jubilados; (2) Sostenibilidad o viabilidad financiera; (3) Flexibilidad; (4) Estabilidad macroeconómica.
La incorporación de la inflación es deseable según el primero y el cuarto criterio. Una tasa de inflación del 10% reduciría, en una década, la capacidad adquisitiva de la pensión casi en dos tercios. ¡Los jubilados morirían de hambre! Desde el punto de vista de la estabilidad macroeconómica interesa que algunos elementos de la demanda agregada se mantengan constantes para compensar las continuas subidas y bajadas de la inversión privada que arrastran al consumo privado. El consumo de los pensionistas contribuiría a estabilizar el ciclo económico si el poder adquisitivo de sus pensiones se mantuviera constante, es decir, si la pensión incorporara la tasa de inflación. 
Quienes conocen las cuentas de la seguridad social objetarán: ¡Bastantes problemas de viabilidad financiera tenemos para que añadamos el coste de la inflación! No tienen en cuenta que la cláusula de la inflación aumenta simultáneamente gastos e ingresos. Los problemas de sostenibilidad financiera, que son previos a la inflación, se controlan mejor a través de la tasa de reemplazo o sustitución. En la actualidad, un trabajador español de salario medio cobra al jubilarse el 82% del mismo. La media de la Unión Europea es del 59%. Tenemos, pues, un holgado margen de maniobra. La maniobra consiste en modelar ese porcentaje cada cinco o diez años para asegurar que las cuotas cargadas a los trabajadores alcanzarán a pagar las pensiones de los jubilados durante los próximos años. Esta medida, acompañada de unos topes máximos y mínimos, merecería un juicio favorable desde los cuatro criterios expuestos. 

La Tribuna de Albacete (16/04/2018)