domingo, 30 de octubre de 2022

Todas contra todes

 

El sábado proliferaron las manifestaciones frente al Ministerio de Igualdad. Protestaban contra la Ley Trans que está a punto de encarar su última etapa legislativa después de haberse saltado todas las anteriores; quiero decir, las exigidas a las leyes serias. Entre los manifestantes, dominio absoluto de mujeres; quiero decir “de mujeres aparentes”, que la ley de marras no distingue entre hombres y mujeres; cada uno es del sexo que se siente. Por las pancartas y consignas coreadas, se intuía una batalla entre PSOE y Unidas Podemos. El inicio de una guerra mundial de “todas contra todes” y “todos contra todo”.

 Para ser lo más objetivo posible, me voy a limitar a leer las pancartas de la foto panorámica que tengo delante.

·         No son trans, “es” un contagio social.

·         Contra el borrado de las mujeres.

·         Deseos no son derechos.

·         Mejor investigar antes de hormonar.

·         Montero, quita las manos de nuestros hijos.

·         Paremos la locura Trans.

·         Mi hija es lesbiana, dejadla crecer sana.

·         Ley Trans: misógina, reaccionaria, sexista.

·         Delirio queer.

·         Ser mujer no es un sentimiento.

·         Por los derechos de las mujeres, no a la ley trans.

·         No existe la “infancia trans”, la habéis inventado vosotras.

·         Mujer, hembra humana adulta.

·         El sexo no se elige.

·         Feminazis al poder.

 Yo no tengo tiempo para asistir a este tipo de manifestaciones. Si alguna vez fuera, me limitaría a plantear una pregunta. “¿Quién se responsabiliza de las consecuencias de educar a nuestros hijos en la ideología de género, de hormonarles y meterles en un quirófano? ¿Quién se atreverá a explicar la incapacitación de esos niños y jóvenes a una vida normal de estudio y trabajo, sus depresiones recurrentes y los posibles suicidios?