domingo, 17 de febrero de 2019

España en modo elecciones



España se ha puesto en “modo elecciones”. En unos meses vamos a votar a nuestros representantes políticos en el Municipio de Albacete, la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, el Reino de España y la Unión Europea. La peculiaridad del modo electoral es que las exageraciones, mentiras, calumnias e insultos salen gratis. “¡Política en estado puro!”, nos dirán.
La sociedad española quedará fracturada entre “izquierdas” y “derechas”. ¿Alguien me podría explicar con hechos en qué consiste una y otra? Yo me aclaro mejor con la distinción “arriba– abajo”. Los que tratan de organizar la sociedad desde el Estado a golpe de decreto ley frente a los que apuestan por la iniciativa privada. De hecho, la distinción está perdiendo su soporte empírico. ¿Qué político va a renunciar a la cultura del subsidio si es la manera más rápida de cautivar votos?
Los insultos más habituales pasarán a ser: “Comunista de extrema izquierda”, “Fascista de extrema derecha”. Un poco más de realismo, por favor. ¿Alguno de los líderes de los partidos españoles desea gobernar como Stalin o Maduro, o como Hitler y Franco?
La corrupción será la más punzante arma arrojadiza en todos los mítines. Nadie se atreverá a decir que la corrupción política está estrechamente relacionada con la cantidad y discrecionalidad de recursos que manejan los políticos y con el tiempo que llevan en el poder.
Confío que durante estos meses los ciudadanos desconecten sus cerebros del “modo elecciones”. Que sólo excluirán de su voto a los líderes que mienten ostentosamente y presumen de sus vergüenzas. A los partidos que reniegan de los derechos fundamentales recogidos en la Declaración Universal de 1948, derechos que por derivar de la dignidad humana no pueden vulnerarse ni siquiera con la excusa de introducir nuevos derechos. A las fuerzas que desean conseguir sus programas sin respetar las normas del Estado democrático de Derecho vertebrado por la Constitución de 1978. Esta sí que puede reformarse, pero siguiendo los cauces establecidos. 
La Tribuna de Albacete (18/02/2019)