domingo, 2 de febrero de 2025

Úrsula y Félix a garrotazos por la amnistía

 

El tema más escabroso que tiene el Gobierno español desde el primer día de su formación es si amnistía a quienes fueron condenados por perpetrar un golpe de Estado en 2017. El debate del pasado 23 de enero en el Parlamento Europeo entre la Presidenta de la Comisión (Úrsula von der Leyen, UL) y el Ministro (Felix Bolaños, FB.) supone un jaque mate al Gobierno español. Permítanme que lo reproduzca con las obligadas simplificaciones.

FB. Me extraña que se preocupa tanto por una ley de Amnistía del Estado español ¿Acaso no somos un Estado soberano?

UL: Sí lo son, pero forman parte de la UE. Cuando un Estado miembro atenta contra sus valores está atacando a la Unión. La Comisión Europea puede y debe velar para que todos los estados respeten los principios que, en su día, aprobaron.

FB. Yo defiendo esos valores y principios tanto o más que usted. Pero debe saber que cada país tiene su historia y sus problemas. Así como el derecho a resolverlos a su manera. La amnistía pretende ser un paso hacia la reconciliación nacional.

UL. La reconciliación no se consigue premiando a quienes han pisoteado la legalidad vigente. Tampoco se teje con el olvido sino con la justicia y la reparación.

FB. Esa visión de la justicia recuerda tiempos pretéritos cuando vengarse del enemigo era lo habitual. Nosotros preferimos resolver los problemas con el diálogo.

UL: La justicia no tiene nada que ver con venganzas sino con aplicar las leyes previamente aprobadas. El diálogo siempre es deseable. Pero el respeto al estado de derecho, la justicia y la igualdad no son negociables. Ese respeto no es un obstáculo para la paz social, antes bien su columna vertebral.  

FB. Las leyes evolucionan a la par que la sociedad. Debemos respetar los resultados de la democracia.

UL. También la democracia tiene sus límites. Los procesos democráticos, pueden pervertirse para conseguir un puñado de votos en el Parlamento.