lunes, 13 de septiembre de 2021

Educonfusión

 

Reiniciamos el curso escolar con normalidad, ¡excelente noticia! La plena normalización de la enseñanza no se conseguirá hasta que los expertos lleguen a un consenso mínimo sobre los objetivos, metodologías y contenidos de cada etapa educativa. Estoy hablando de expertos educativos, no de políticos; de metodologías didácticas, no de estrategias políticas e instrumentos de ideologización. Desde mi modesta perspectiva de profesor daré mi opinión sobre tres temas que son una fuente permanente de confusión.  Este artículo bien podría titularse “carta de un viejo profesor a las últimas declaraciones del Ministro de Universidades”.

Memoria. Cada una de las ocho leyes educativas de los últimos cuarenta años, empieza por condenar la enseñanza memorística. Es evidente que aprender no es memorizar. No menos cierto es que la memoria es una de las potencias constituyentes del ser humano; ayuda en muchos quehaceres, incluido el aprendizaje. La clave está en combinar memoria y práctica. Expliquemos al alumno los diferentes tipos de oraciones gramaticales y pidamos que resuma lo explicado con sus propias palabras y ejemplos.

Internet. Las nuevas tecnologías cumplen un papel fundamental en la enseñanza. Nadie lo pone en duda. Pero sería un error concluir que no vale la pena explicar lo que el alumno puede encontrar en internet. En internet está todo, pero hay que saber entender lo que allí se escribe y discriminar lo bueno de lo malo. Para eso se necesita mucho estudio en el aula y en clase. Internet será una maldición si desplaza el estudio y la reflexión personal.

Exigencia. La vida es muy exigente. La exigencia en los estudios ayudará a nuestros alumnos a afrontarla con éxito. Su inteligencia y voluntad crecerá con el esfuerzo. Quienes desean eliminar el fracaso escolar eliminando los suspensos o los exámenes de recuperación, están labrando el fracaso vital de esos niños y jóvenes.

La Tribuna de Albacete (13/09/2021)